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Por La Época -.
El sábado pasado dos proclamaciones dentro del campo nacional-popular se hicieron. La ciudad de Oruro fue la elegida por el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, para aceptar su postulación a la Presidencia del Estado Plurinacional. En la ciudad de Cochabamba el expresidente Evo Morales fue proclamado como “el único” candidato para las elecciones del 17 de agosto próximo.
Lo cierto es que de las dos proclamaciones la que concentró la atención mediática, incluso en algunos lugares del exterior, es de Rodríguez, quien por distintas razones se hizo esperar para confirmar su participación como candidato a la presidencia. La de Evo Morales no tuvo mayor trascendencia.
El carácter relevante de la noticia de lo que aconteció en la ciudad de Oruro es que confirma que el expresidente Evo Morales ya no solo que ha perdido la centralidad en la conducción del movimiento campesino indígena de Bolivia, lo que ciertamente se constató en el carácter parcial, aunque no menos destructivo, de los bloqueos de caminos que el “evismo” protagonizó contra el presidente de izquierda Luis Arce en enero y octubre de 2024, provocando serios daños a la economía nacional, sino que la ha perdido también en el Trópico de Cochabamba, donde tres de seis federaciones de cultivadores de coca respaldan al presidente del Senado.
La oficialización de la candidatura de Rodríguez complejiza el tablero electoral para el campo nacional-popular pues hasta ahora suman tres en carrera. El presidente Luis Arce, quien cuenta con el respaldo del MAS, el Pacto de Unidad-COB y la mayor parte de los partidos de izquierda, siempre se ha mostrado proclive a la nominación de un solo candidato para defender y profundizar el Proceso de Cambio, mientras el expresidente Morales nunca se ha cansado de reiterar que el único candidato es él. Dos conductas absolutamente distintas para encarar el riesgo de que la derecha y la ultraderecha se hagan del gobierno después de casi dos décadas.
Faltas pocos días para que se registren oficialmente ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) los candidatos a la Presidencia. En la derecha el panorama no va a sufrir una mayor variación respecto a la fragmentación de sus candidatos luego de fracasar el intento de constituir un bloque de unidad. Hasta ahora están en carrera Samuel Doria Medina, Jorge Tuto Quiroga, Manfred Reyes Villa, Jaime Dunn, Rodrigo Paz y el ciudadano de origen coreano Chi.
En el campo de la izquierda y el progresismo no todo está cerrado, aunque también hay un escenario complejo. Todavía es posible algunas sorpresas que alejarán o aproximarán la continuidad del Proceso de Cambio abierto por la lucha popular en el primer quinquenio del siglo XXI. En todo caso es el momento de mayor peligro que enfrenta la Revolución Democrática y Popular.
Opinión | La Época – Con sentido del momento histórico
